En primeras instancias es importante conocer de qué se trata la Toma de decisiones, como elemento determinante para lograr el cumplimiento de ciertas condiciones dentro del sector empresarial. Puede decirse que se trata de un proceso en el cual mediante un análisis y selección se puede considerar una alternativa, en donde se plantea una actividad y se lleva a cabo.
Por lo tanto, es un procedimiento que se aplica dentro de las empresas para seleccionar una opción entre varias opciones, siempre considerando las necesidades propias y la situación de la misma. Esto se hace con el fin de que los objetivos puedan ser resueltos y que los problemas o situaciones de riesgo sean dejados de lado.
A pesar de que la toma de decisiones ha sido un elemento que se ha usado entre los procesos que se aplican en el sector empresarial. También es posible que se aplique en ciertas áreas cotidianas, ya sea a nivel personal o familiar.
Sin embargo, es imprescindible que todo profesional logre manejar las técnicas más adecuadas y los pasos que debe seguir para realizar la mejor escogencia. Para ello, es necesaria la profesionalización, opción que puede brindar al cursar la Carrera de Ingeniería Industrial auspiciada por la Universidad de San Sebastián.
¿Cuáles son los pasos que debe seguir el proceso de toma de decisiones?
Cuando se trata de los pasos a seguir en la toma de decisiones, se deben considerar ciertos criterios, los cuales se encuentran divididos y que varían según sea el área en el cual se integre. Estos pasos son:
- Identificación de los problemas o las situaciones de riesgos que se presentan dentro de la empresa.
- Considerar los criterios bajo los cuales se deben tomar las decisiones, teniendo en consideración los elementos de relevancia para darle solución al conflicto.
- Establecer cuáles son las prioridades según sean los criterios de la dirección empresarial, estipulando los de mayor importancia y considerando cierta jerarquía.
- Plantear, mostrar y localizar todas las posibles soluciones a los problemas.
- Disponer del tiempo necesario para analizar las propuestas existentes, tomando en cuenta que de allí resultaron consecuencias o beneficios.
- En adelante, se procede a seleccionar la mejor opción y se descartan aquellas que no sean posibles, procediendo a comenzar su aplicación.
- Mediante el proceso de aplicación y control es posible desarrollar las ideas que se han elegido y deben observarse los comportamientos de la situación.
- Finalmente, es debido evaluar los resultados que se han obtenido mediante el proceso de selección y aplicación. De allí resultará si los problemas fueron solucionados o si la situación puede empeorar.
Consideraciones a tener en cuenta para la toma de decisiones
Dentro de la toma de decisiones existen una serie de criterios que deben tenerse en cuenta. Tales como el juicio, la adaptación, la flexibilidad, los riesgos, las incertidumbres, las preferencias de la dirección, la experiencia que los mismos posean y las decisiones que se tomen. Lo que en definitiva conlleva un resultado, sin importar que los mismos sean efectivo o vayan en detrimento de la actividad empresarial.
Asimismo, es importante tener en cuenta la experiencia con la que se cuenta, las decisiones tomadas y los resultados que se obtendrán. Esto evidenciará ciertas consecuencias.
Tipos de toma de decisiones
Según sea la decisión que se ha de tomar, dentro de la toma de decisiones existe una tipología establecida, la cual se basa en:
Decisiones personales
Son las decisiones que se presentan teniendo en cuenta las propias necesidades individuales y personales.
Decisiones racionales
Se tratan de las decisiones tomadas bajo el raciocinio y los hechos que puedan comprobarse para poder tomar las decisiones requeridas.
Decisiones intuitivas
Son las decisiones empleadas según la experiencia y la intuición de la directiva, siempre en la búsqueda de la mejor opción que sea posible para darle solución a un conflicto.
Decisiones organizacionales
Tratándose de las decisiones corporativas y empresariales, las cuales asumen la directiva y se realizan según sean las necesidades de las empresas. Acudiendo a las alternativas que se proponen y cuidando el proceso que se aplica para su ejecución.
Decisiones de rutina
Se tratan de todos los procesos que son habituales y frecuentes, que no necesitan de determinados análisis o actividades especiales.
Decisiones no programadas
Son las decisiones que se toman ante una situación que no se encuentra prevista en el que se deben ejecutar actividades de forma rápida.
Decisiones programadas
En el proceso de toma de decisiones se consideran las decisiones programadas, las cuales gozan de un tiempo considerable para analizar las posibles soluciones al conflicto.
En los procesos que se aplican en la toma de decisiones en el sector empresarial, es posible que las acciones que se tomen logren determinar el éxito o el fracaso de la organización. Es por esto, que estas actividades son ejercidas en gran medida por la gerencia, los cuales son los que determinan qué es lo más conveniente para la empresa. Para ello, nada como contar con un profesional egresado de la carrera de Ingeniería Industrial, carrera impartida por la Universidad de San Sebastián, institución con las mejores acreditaciones.