Blog de Ingeniería Industrial: Lo bueno, lo malo y lo desconocido
Seleccionar una carrera universitaria no es sencillo, ya que de esa decisión, dependerá tu futuro. Por esta razón, es importante que te concentres en escoger la que te guste, te apasione, la que te otorgue más beneficios y en la que tengas más y mejores aptitudes. Una carrera que puede tener todas estas características, es estudiar ingeniería industrial.
Para empezar, la ingeniería industrial es uno de los campos de la Ingeniería que tiene por objetivo y área de estudio el crecimiento de las organizaciones de forma óptima. Es decir, aumentar la rentabilidad y reduciendo sus costes. De igual manera, el estudio de la ingeniería industrial está en la búsqueda de la creación de más y mejores empleos, aumentando la sostenibilidad de la empresa y haciéndola amigable con el medio ambiente.
Como profesional de esta rama de la ingeniería, estarás contribuyendo en distintas áreas que tienen que ver con el desarrollo de tu país. Es crucial que tengas en cuenta que esta carrera tiene que ver con la producción en diversos sectores de la manufactura de bienes y servicios. Requiriendo de una constante simplificación de todos sus procesos, necesitando mejoras y soluciones óptimas a los diversos inconvenientes de la producción en masa. Si requieres de mayor información puedes acceder a nuestro enlace, allí encontrarás toda la información necesaria.
¿En qué consiste la ingeniería industrial?
El estudio de la ingeniería industrial puede capacitarte para llevar un control óptimo de los sistemas de producción, logística, análisis de procesos y el diseño de los mismos. Del mismo modo, te va a enseñar a gestionarlos de forma correcta. Todo ello con el fin de desarrollar estrategias que conlleven a mejores procesos de producción de bienes y servicios de alta calidad.
En el mismo orden de ideas, una de las metas de estudiar ingeniería industrial es que los profesionales obtengan los conocimientos necesarios para implementar y desarrollar sistemas que ayuden a mejorar todos los procesos y, con ello, ayuden a aumentar el desarrollo productivo, favoreciendo las condiciones de trabajo.
Para lograr esto, es preciso que un profesional de esta carrera esté a la vanguardia de las tecnologías existentes. Esto va a permitir una elaboración precisa de procesos productivos que cumplan con las metas propuestas en las organizaciones. Hacer esto, dará el empuje necesario para la creación de industrias y de compañías que puedan competir en el mercado nacional como internacional.
Otro de los objetivos que persigue esta rama de la ingeniería, es el de aumentar la sostenibilidad y reducir el impacto ambiental. Además, debe tener como objetivo en colaborar lo más que se pueda en el bienestar social. Esto quiere decir que, a la par de lograr el crecimiento de la empresa, el ingeniero industrial profesional debe tener en cuenta los dos aspectos mencionados anteriormente.
Beneficios de estudiar ingeniería industrial
Al estudiar ingeniería industrial, debes tener en cuenta los beneficios que ella trae consigo. Esto debido a que tendrás muchas oportunidades de dominar un amplio margen del sector empresarial. Al menos, estarás en contacto con las áreas más importantes y críticas de una organización. Por ello, es muy buena idea que comiences a estudiar esta carrera y que visualices tu futuro como un ingeniero de esta área.
Obtienes una buena remuneración económica
Si vas a estudiar ingeniería industrial, debes saber que es una carrera ideal si quieres tener buenos ingresos monetarios. Esto debido a que puedes ejercer esta profesión en casi cualquier país del mundo. Para ello, es necesario que apliques todos los conocimientos adquiridos en tu empresa u organización.
Si has podido trabajar en tu campo y quieres expandir tus horizontes, debes tener un currículum llamativo y proactivo a la hora de buscar trabajos mejor remunerados. Además, puede ser que te contrate una empresa de renombre o una trasnacional, por ejemplo.
Podrás destacarte en diversas organizaciones
Dispones de un amplio abanico de opciones para trabajar como ingeniero industrial, ya que se trata de un campo del conocimiento muy extenso, resultando en algo muy positivo. Esto se debe a que, muchas veces, los profesionales de la ingeniería industrial son contratados para diseñar, gestionar, operar, entre otros, todo lo referente a los sistemas de producción.
Del mismo modo, resulta viable que, como ingeniero industrial, puedas optar por ser un consultor y un administrador. Esto se debe a que puedes ser capaz de hacer diagnósticos precisos, teniendo la habilidad de gestionar negocios de manera exitosa.
Incluso, puedes capacitarte perfectamente como un proveedor de cualquier empresa. Otra de las opciones que tienes a tu disposición, es la de ser un consultor de otras organizaciones simultáneamente. En la actualidad, la tecnología juega un papel muy importante en la optimización de procesos productivos. Esto quiere decir que, si estás a la par de los últimos avances tecnológicos, podrás efectuar tu trabajo con facilidad en distintas áreas.
Tendrás la oportunidad de crear y gestionar compañías propias
Los ingenieros industriales tienen los conocimientos suficientes como para crear y diseñar todos los aspectos más importantes de una organización, trasladándola a la suya propia. Al estar la ingeniería industrial ligada a la administración y a los recursos humanos, puedes hacerte experto en el manejo del personal. Podrás ayudar a los empleados a dar lo mejor de sí mismos, consiguiendo que alcancen su máximo potencial y lograr que sean más productivos.
Si has alcanzado un cierto nivel de liderazgo, capacidad para controlar, gestionar, administrar y cumplir los objetivos de una empresa de terceros, entonces estarás listo para dar el salto de calidad y poder abrir tu propia compañía. Si logras ser un ingeniero experimentado, vas a cumplir a cabalidad con todos los objetivos de las áreas administrativas y productivas de la empresa, logrando que puedas surgir por tu cuenta.
Estudiar ingeniería industrial tendrá validez internacional
Si tu meta es poder ejercer tu profesión en el extranjero y triunfar en el país en el que deseas vivir, es posible al estudiar ingeniería industrial. En este caso, debes tener en cuenta ciertos aspectos que, si bien no son universales, te pueden servir de guía para que puedas lograr el objetivo de ejercer tu profesión en otro país.
- Debes tener experiencia comprobada de haber trabajado anteriormente en una compañía de tu país de origen. En caso contrario de no tener experiencia laboral, debes tenerla certificación de los cursos que has hecho a lo largo del tiempo.
- La actualización tecnológica es importante. Por ello, debes estar al tanto de los avances y actualizaciones que se han estado llevando a cabo, al menos, en el país en donde vas a optar a trabajar. De esta forma, comprenderás qué es lo que están buscando las organizaciones para ser más competitivas en el mercado.
- Las buenas empresas siempre buscarán la excelencia. Por esta razón, debes contar con un historial de tus experiencias laborales anteriores y que estén muy bien referenciadas. Esto debido a que tendrás que comprobar si realmente has trabajado y has ejercido la profesión.
Una de las aptitudes que tienes que tener sí o sí, es el aprendizaje de otro idioma. Preferiblemente el inglés. Cuando estés en el extranjero, es casi seguro que tengas que hacer negocios o atender a empresarios de los Estados Unidos y de otras naciones. Actualmente, el inglés sigue siendo el idioma universal, así que es una obligación aprenderlo.
Salir bien preparado al extranjero es tan obligatorio como respirar. Sobre todo, debes estar bien preparado en diferentes áreas de producción de una compañía, si eres ingeniero industrial. La preparación te abrirá más puertas y no tendrás que empezar desde cero de nuevo. Adquiere todos los conocimientos que puedas en diferentes áreas y así, ampliarás notablemente tu currículum.
Pues ampliar tu especialización a través de postgrados y doctorados
Cuando termines de estudiar ingeniería industrial, tu aprendizaje no debe acabar allí. Está claro que debes seguir adquiriendo conocimientos cada vez más especializados. Es todo un esfuerzo, pero valdrá la pena totalmente. No solamente vas a adquirir más beneficios de índole laboral, contará a tu favor cuando estés buscando empleo en el extranjero.
Es por ello que, todo el tiempo que quieras invertir en una especialización, ya sea un postgrado o un doctorado, estarás sumando puntos a tu perfil profesional. Esto se traducirá en que vas a hacer el trabajador más capacitado y con mayor nivel en cualquier empresa que se fije en ti.
Al estudiar ingeniería industrial obtendrás más capacidad de emprendimiento
Si vas a estudiar ingeniería industrial, probablemente no veas como una opción trabajar para alguien más después de egresar. Si quieres ser tu propio jefe y tener una empresa propia, esta profesión te podrá brindar esta oportunidad. Por supuesto, debes tener en cuenta el conocimiento del negocio, del mercado y del nicho en donde quieres hacer tu actividad comercial.
Teniendo claro todo lo que has leído anteriormente y si lo pones en práctica, todo lo demás vendrá por añadidura. Quiere decir que las coas con tu propia empresa marcharán bien y es posible que tengas éxito en el negocio. Solo hace falta la voluntad y las ganas de querer tener tu propio negocio.
Esta carrera no tiene el riesgo de quedar obsoleta
A medida que pasa el tiempo, el mundo de las empresas y los negocios tiende a cambiar. Esto debido a que nuevas necesidades surgen, nuevas tendencias aparecen y las organizaciones tienen que adaptarse a estos cambios. Es por ello que se hace imperativo que selecciones una carrera como esta, que te da la seguridad de no quedarse obsoleta por el camino.Estudiar ingeniería industrial te va a permitir una fácil adaptación a los cambios tecnológicos que se dan en el mercado actual. Además, es casi una obligación tener conocimientos de las últimas tecnologías para competir mejor en esta área tan exigente. Si deseas ser parte de los profesionales de este sector, solamente podrás acceder a través de nuestro enlace y encontrarás toda la información necesaria.