Un análisis metalográfico permite obtener resultados que son útiles para los Ingenieros al momento de emplear los materiales adecuados en el entorno necesario. Entendiendo que la metalografía se trata de la constitución y estructura de los metales y las aleaciones. Es de importancia para esta ciencia analizar el comportamiento y la composición de los materiales. Partiendo de este punto, se hace un determinado análisis en el cual es necesario disponer de una superficie de dichos materiales para su estudio.
Debido a la necesidad de poseer una muestra para el análisis metalográfico, para el cual es necesario disponer de una superficie plana y pulida. Esto dará como resultado una superficie especular que luego será sometida a un ataque químico para poder ser observada a través de los diferentes instrumentos de estudio, siendo el más común el microscopio.
Para la Ingeniería industrial, son necesarios estos tipos de procesos que divulgan la composición de un material que en determinado momento podría ser utilizado en un proyecto. Por tanto, la Universidad de San Sebastián estimula el ingreso a dicha carrera con el fin de garantizar profesionales adecuados para el sector.
Pasos para un análisis metalográfico
Dentro de un análisis metalográfico, deben seguirse de forma cuidadosa una secuencia de actividades qué permitirán la preparación de una muestra para el mismo.
Corte de muestras o probetas
Como primer paso dentro del análisis metalográfico, siendo uno de los más importantes es lograr preparar las muestras. Para ellos, se deben cortar las muestras extraídas de los materiales indicados para el análisis. Es relevante asegurarse de que no se desarrolle un calor excesivo que pueda llegar a modificar o destruir la estructura.
Es así como la muestra tras el procedimiento no debe presentar ningún tipo de daño térmico o cualquier tipo de deformación, así esta sea de tamaño reducido. En caso contrario, si la muestra no logra ser la adecuada, puede que el proceso lleve más tiempo del esperado y no se podrán remover ninguna distorsión que se encuentre en la pieza.
Incluso, si se llegase a realizar un lijado o un pulido en la muestra, es posible que en el análisis microscópico tienda a presentar algún tipo de error. Por ende, es necesario que la estructura se mantenga en su forma original, para que el trabajo de los resultados que se esperan.
Es importante hacer uso de los materiales o instrumentos de trabajo qué se adecuen a la obtención de una muestra de calidad, es importante no perjudicarla o dañarla
Montaje y Empastillado de muestras/probetas metalográficas
El segundo paso dentro del análisis metalográfico es el montaje y empastado de la muestra. En caso de utilizar resinas empastilladas, esta permite una serie de beneficios con respecto a los materiales que no han sido empastillados. Entre algunas de las soluciones que prestan se encuentra el poder proteger y soportar la superficie de la muestra, facilitando el manejo de esta y logrando disponer de varias piezas en un mismo montaje.
Asimismo, este análisis es capaz de lograr que el tamaño de las muestras se mantengan iguales. Cuándo se somete a este proceso, el montaje puede hacerse tanto en calor como en frío. Para distintos procedimientos se utilizan una variedad de componentes e instrumentos qué permiten hacerlos.
Ataque Químico
Dentro del ataque químico se lleva a cabo la acción de lijado y pulido en dónde se prepara la muestra para lograr esa superficie lisa ideal para el análisis microscópico. De Igual manera, se hace uso de ciertas herramientas que permiten preparar la muestra, consiguiendo alcanzar la superficie deseada.
Una vez logrado ese efecto se hace empleo de un reactivo químico que selecciona y ataca diferentes sesiones de la estructura, permitiendo que el microscopio logré visualizar e idear los resultados que el especialista espera.
Prueba de Microscopio y Análisis de Imagen
Para este procedimiento se hace uso de un microscopio invertido que permite analizar la muestra, si interpone la coloración de los metales y aleaciones, este trabaja a partir de la luz que refleja el metal. Para ello, es imprescindible detenerse a observar la muestra que se encuentre preparada en probeta o que la superficie pueda ser pulida.
Equipos integrados a los análisis metalográfico
Para la ejecución de un análisis metalográfico es necesario entender que se necesita de una serie de instrumentos y herramientas de orden tecnológico que faciliten el desarrollo y la construcción en diversos proyectos.
Se hace uso de instrumentos como las máquinas para corte de muestras, Asimismo, se necesita meta lograr metalografía y equipos para el encapsulado. Para uno de los procesos aplicados en dicho análisis se hace uso de una pulidora con diversos diámetros, ya sea que está sea manual o automática. El microscopio que se usa para este tipo de labores posee determinadas características que le permiten al material ser visualizado a pesar de la opacidad de los metales o aleaciones.
Estás herramientas permiten suministrar información resultante de los análisis, en dónde se determina cuál es la composición estructural de la pieza, el tamaño del grano, los procesos a los cuales se ha sometido y la formación de esta. Siempre se debe tener en cuenta que existen márgenes de error en donde se pueda presentar una porosidad, una grieta, entre otros.
Del mismo modo, se conoce que todas las superficies están expuestas a la corrosión, sobre todo si son materiales que han sido sometidos a diferentes tratamientos térmicos. Al aplicar estás herramientas dentro de las empresas o proyectos debe tenerse en cuenta que le provee al trabajo mayor control en la calidad, así como en los daños a la producción, la investigación y el desarrollo.
Todo profesional de la Ingeniería industrial debe conocer a ciencia cierta cómo es el funcionamiento de estos análisis y cuál es la importancia que poseen los mismos para las labores que se desarrollan. Es de destacar que la Universidad de San Sebastián, dispone de Los mejores contenidos en este aspecto, logrando formar profesionales ideados para tal fin.